del Seminario Latinoamericano de Formación Ministerial, afirmamos que:
ESPIRITU SANTO
Creemos en la personalidad, deidad e igualdad del Espíritu Santo con el Padre y el Hijo. Creemos que el Espíritu Santo regenera al ser humano perdido y pecador para salvación, y que mora dentro del creyente para guiarle, consolarle, ayudarle, enseñarle y darle poder para vivir una vida de santidad y de servicio.
EL HOMBRE
Creemos que el ser humano fue creado a la imagen y semejanza de Dios, Él los creó sin pecado, creó al hombre y a la mujer como la corona de su creación.
Creemos que por su transgresión voluntaria el ser humano cayó en desobediencia y llego a ser pecador y así incurrió en la muerte espiritual y física, quedando separado de Dios.
Por esta razón creemos que el ser humano nace con una naturaleza pecaminosa y que solamente puede alcanzar la eterna salvación por gracia, mediante la fe en Jesucristo.
LA IGLESIA
Creemos que la iglesia de Cristo es universal y está formada por todos los redimidos de todas las edades, creyentes de cada tribu, lengua, pueblo y nación.
Creemos que las iglesias locales son la comunidad del pueblo de Dios, las cuales están formadas por todos aquellos que creen en el Señor Jesucristo y que son redimidos por su sangre y son nacidos de nuevo por el Espíritu Santo.
LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO
Creemos que el Señor Jesucristo regresará en forma personal y visible, en poder y gloria, para consumar su reinado.
Esta promesa de su venida, nos impulsa poderosamente a evangelizar, porque recordamos sus palabras que es necesario que el Evangelio sea predicado a todas las naciones.
Creemos que en el período que media entre la ascensión de Cristo y su segunda venida, la misión del pueblo de Dios tendrá que completarse y que no podemos detenernos antes del fin.